Mi nombre no tiene importancia, mi edad tampoco. Sólo diré que mi título de Vicioso y Hombre Malo me fue conferido, tras estudiar la vida entera en su academia, por una milenaria formalidad ideada naturalmente por los hombres. Y que si de algo soy testigo es de un derrumbe moral que me ataca por todos los flancos y me obliga a sumarme a él, en el entendido de que la verdad no es otra cosa que aquello que todos tratan de ocultar.
Visitas de la última semana a la página
lunes, diciembre 23, 2019
Socialismo, capitalismo
Las sociedades socialistas son femeninas; las capitalistas, masculinas. ¿Cuándo me siento mujer? Cuando escribo como un hombre. Allí me hago salvaje en mi mundo mío y propio, abro senderos, asumo riesgos, levanto catedrales de fantasía. Y sin embargo de qué escribo: de mi interioridad, de cómo soy. Lo reconozco a estas alturas con un dejo de humor. Cuanto más hombre soy es cuando admito mi femenina sensibilidad.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
TÚ y YO
Yo soy tú
Tú eres yo
Cuando te bebo
Me derramó en tinta
Cuando me masticas
Danzas la noche
¿Por qué dejamos que la alambrada de la Y nos separe como a extraños?
Un abrazo
La Lechucita
Publicar un comentario